CÓRDOBA.- Uno era el flamante campeón del campeonato de Primera División y el otro el que se quedó a las puertas de ese título, con la bronca de no haber podido pelear hasta el final. Eran Boca y Rosario Central, y otra vez la alegría fue "Xeneize", que se llevó la Copa Argentina ganando el duelo 2 a 0.
Luego de un primer tiempo jugado a tono con una gran final, de ida y vuelta y con chances en los dos arcos, Boca aprovechó el complemento para sacar ventaja con un dudoso penal sobre Gino Peruzzi, luego de que el juez de línea le anulara bien un gol a Marco Ruben (por off side Larrondo).
Y desde los 12 pasos estuvo firme Nicolás Lodeiro, el uruguayo que volvió a acertar y puso arriba a Boca para tratar de comenzar a dominar el partido ante un rival peligroso, que le desnudaba sus flaquezas defensivas.
Sin embargo, lejos de achicarse, Central cobró fuerzas y se hizo dueño de la pelota. Con más ganas que chances claras para empatar, el equipo de Eduardo Coudet buscó el empate mientras el "Xeneize" le cerraba los caminos. Fue ahí cuando Boca acertó el tiro de gracia, de contra.
Andrés Chavez, en otro dudoso off side que esta vez el árbitro Ceballos no cobró, empujó adentro un centro de Marcelo Meli y estableció el 2-0 definitivo cuando el duelo se moría. El 2-0 que dejó a Boca con la doble corona y a Central otra vez sin nada, esta vez acusando de todos sus males a un pésimo arbitraje.
Para llegar hasta acá Boca dejó en el camino a Huracán Las Heras de Mendoza por 2 a 0 (con goles de Daniel Osvaldo y Andrés Chávez), a Banfield 3 a 0 (Pablo Pérez, Jonathan Calleri y Carlos Tevez), Guaraní Antonio Franco de Misiones 4 a 0 (Fernando Gago, Calleri, Tevez y Chávez); Defensa y Justicia 2 a 1 (Tevez y Andrés Cubas) y Lanús 2 a 0 (Nicolás Lodeiro y Tevez).